Las fronteras de un libro nunca están claramente definidas, atrapado en un sistema de referencias a otros libros, otros textos, otras frases: es un nodo dentro de una red, una red de referencias.
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Creemos que nuestro presente se apoya sobre intenciones profundas, necesidades estables; pedimos a los historiadores que nos convenzan de ello. Pero el verdadero sentido histórico reconoce que vivimos, sin referencias ni coordenadas originarias, en miríadas de sucesos perdidos.
1 comentario:
Yo también creo como Foucault que no hay fronteras entre los libros, y que uno remite a otro u otros. Y creo que entre los blogs también pasa lo mismo: una misma frase, una misma idea, una misma imagen, un mismo video, que nos remiten a otros.
Saludos.
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